Miles Davies (Miles Dewey Davis III, Alton, Illinois, 26 de mayo de 1926 - Santa Mónica, California, 28 de septiembre de 1991) fue, probablemente, el más grande músico de jazz, el hombre que cambió el curso de la música popular en más de una ocasión, uno de los hombres mejor vestidos del siglo XX, y el creador del mejor chili conocido por el hombre.
Mucho se ha escrito sobre su música, su actitud, su estilo al vestir y sobre su tendencia a ser grosero con Nancy Reagan (ver nota incluida al final sobre la anécdota de Miles en su visita a la Casa Blanca), pero pocos han hablado de sus dotes culinarias.
"Mira y aprende", le decía Miles a Frances, la primera de sus tres esposas, mientras le enseñaba a cocinar, según ella recordaba en una entrevista años después de la muerte del genial músico.
En su autobiografía Davis reconocía que amaba la cocina, desde "la gran cocina francesa" hasta los platos tradicionales de la cocina afroamericana. Su plato favorito fue una adaptación propia de uno que probó en un garito de soul-food, al que bautizó como "Miles’s South Side Chicago Chili Mack". "Enseñé a Frances a preparar ese plato, y enseguida empezó a cocinar todo mejor que yo", narraba Miles en sus memorias. Frances contaba que dejó atrás una fabulosa y prometedora carrera como bailarina clásica para convertirse en la cocinera particular de Miles. ¿Por qué?. "Porque estaba profundamente enamorada".
El chili de Frances era el que más gustaba a Miles, al menos según ella decía. "Era lo que mejor le alimentaba después de una borrachera de tres o cuatro días". Este plato era el elegido por el matrimonio Davis para las grandes ocasiones. Como por ejemplo el día que organizaron una jornada de recaudación de fondos para Robert Kennedy, a la que, por cierto, el político no se presentó. Sí asistieron artistas como Bob Dylan, Quincy Jones o Leonard Bernstein, entre otros. La última vez que Frances preparó Chili para Miles fue en su 38 cumpleaños. "Una semana después le dejé".
Miles’s South Side Chicago Chili Mack
Ingredientes (para 6-8 personas):
• 100 g de grasa de tocino• 1 kg de carne de ternera cortada en dados de unos 2 cm
• 1 pimiento verde, troceado
• 1 cebolla grande, troceada
• 1 diente de ajo grande, picado
• 1 cucharaditas de comino en polvo
• 1 cucharaditas de chile en polvo
• 1 lata de 1 kg de tomate triturado
• 500 ml de caldo de ternera o de pollo
• 2 cucharadas de mostaza
• 1 cucharada de vinagre
• 1 lata de 500 g de frijoles cocidos
• Sal y pimienta al gusto
Preparación:
Poner en una sartén grande la grasa de tocino y calentarla a fuego medio. Sazonar la carne con sal y pimienta al gusto y dorarla en la sartén.Una vez retirada la carne de la sartén, añadir el pimiento y la cebolla y cocinar hasta que esté bien pochada. Añadir el ajo durante este proceso. Una vez esté casi pochado añadir el comino y el chile.
Mezclar la carne, el tomate, el caldo, la mostaza, el vinagre y los frijoles en una olla y poner al fuego medio-alto. Añadir también el pimiento y la cebolla. Sazonar al gusto. Llevar a ebullición, tapar y colocar inmediatamente después en el horno.
Cocinar durante alrededor de 3 horas o hasta que la carne esté tierna.
Se puede servir solo con un poco de pan de maíz, o acompañando a un plato de arroz o de spaghetti.
Nota sobre su visita a la Casa Blanca:
Mientras estés sentado a la mesa disfrutando de este poderoso Chili, puedes impresionar a tus invitados aún más con esta sorprendente historia sobre el día que Miles Davis fue invitado a cenar a la Casa Blanca en 1987, por el entonces presidente Ronald Reagan.
Algunos invitados parecían desconcertados en cuanto a quién era esa tal Davis con el que estaban compartiendo mesa. Finalmente fue Nancy Reagan quien se dirigió a él para preguntarle cúales eran los méritos por los que había sido invitado a aquella exclusiva cena en la Casa Blanca. Miles respondió: "Bueno, creo haber cambiado el curso de la música unas cinco o seis veces. Y usted, ¿qué méritos ha hecho, excepto follarse al presidente?".