“Me encanta la cocina y disfruto muchísimo con la comida, pero curiosamente, una de las cosas que más me gusta es comerme las sobras del día anterior. La comida me sabe mucho mejor calentándola al día siguiente”. Barbra Streisand (Barbara Joan Streisand , Nueva York, 24 de abril de 1942), cantante, compositora, actriz, productora y directora de cine. Es una de las mujeres que más discos ha vendido en todo el mundo y con un palmarés envidiable: dos premios Oscar, cuatro Emmy, ocho Grammy, cuatro Globos de Oro y un Tony.
“Uno de mis pequeños placeres son las patatas asadas” dice Barbra, además de reconocer que “si para cenar esta noche me dan a elegir entre un “filet mignon” y una hamburguesa, no dudo un instante en elegir lo segundo”.
No se trata de una persona conformista gastronómicamente hablando, es completamente impredecible. Sus gustos van desde lo más sencillo a lo más exótico: “Me encanta el caviar sólo o acompañando una patata asada”.
Las pasiones gastronómicas de Barbra van desde las setas (crudas en ensalada, para una sopa o rellenas con crema agria) hasta los caracoles a la provenzal. Sin olvidar la sopa de pollo que su madre preparaba y llevaba para su hija al backstage los días de matinée, ni algunas delicatesen de la cocina judía, como el Kiska (una especie de salchicha con carne especiada) y el repollo relleno.
A pesar de su gran éxito en el mundo del espectáculo y de haber podido saborear los más exquisitos manjares de cualquier rincón del mundo, Barbra todavía disfruta de la comida que le gustaba en su infancia. "Me encanta la comida china, es uno de mis secretos de belleza", comentaba entre risas. Este gusto le viene de su adolescencia, cuando trabajó como cajera en un restaurante chino, siendo aún hoy capaz de recordar el nombre de los platos en mandarín.
Siempre que tiene invitados en casa, cosa bastante habitual, se toma muy en serio la preparación de la cena, en todos los aspectos. Barbra planifica el menú, organiza la vajilla y se encarga de la decoración y los arreglos florales. Pero lo que nunca falta en una de sus cenas es su postre favorito; un helado de café de creación propia, al que ella llama "the instant ice cream" ("el helado instantáneo). "Ese helado es una perdición", dice. "Y más si lo acompañas con salsa de chocolate y nueces”.
Helado instantáneo de café
Esta receta de la propia Barbra fue publicada por el diario "The Press Courier" el domingo 27 de marzo de 1966, acompañando a una entrevista de la artista.
Para el helado:
Ingredientes (para 6 personas):
• 250 ml de leche• 24 malvaviscos, o lo que comúnmente conocemos como esponjas o nubes
• 2 cucharaditas de café
• Una pizca de sal
• 250 ml de nata líquida
Preparación:
Calentar la leche a fuego lento. Ir agregando los malvaviscos o esponjas, revolviendo bien hasta que se hayan disuelto. Añadir el café instantáneo y la pizca de sal y mezclar bien. A continuación se deja reposar a temperatura ambiente hasta que temple. Una vez templado se coloca la mezcla en moldes o en una tarrina y se introduce al congelador. Transcurridos unos 35-40 minutos(depende de la temperatura a la que tengamos programado el congelador, lo mejor es ir comprobando que no se nos congela del todo) sacar del congelador y revolver la mezcla para evitar la formación de grandes cristales de hielo. Batir la crema hasta que esté espesa. Volver a introducir en el congelador hasta que esté firme.
Para la salsa de chocolate:
Ingredientes:
• 100 g de chocolate sin azúcar• 50 g de nueces machacadas (o almendras tostadas)
• 100 g de azúcar
• 2 cucharadas soperas de jarabe de maíz (o miel, en su defecto)
• 125 ml de agua hirviendo
• 1 cucharada sopera de mantequilla
• 1 cucharadita de esencia de vainilla
• 1 pizca de sal
Preparación:
Derretir el chocolate y la mantequilla al baño maría. Diluir con el agua hirviendo. Añadir el azúcar, la sal, el jarabe de maíz y mezclar bien.A continuación calentamos la mezcla hasta que hierva, revolviendo con frecuencia para evitar que se nos queme. Enfriamos a temperatura ambiente. Por último se añaden las nueces y la esencia vainilla.